Notas volcánicas
Es curioso como en un espacio tan "reducido" se puede dar tal concentración de volcanes.
Supongo que no estaré dando a conocer ningún record mundial, ni nada por el estilo, porque seguramente en otras partes más recónditas de este sufrido planeta, habrán cosas más extrañas.
Pero, insito, es curioso, por lo menos para esta mente tan pequeñita que escribe esta sarta de pamplinas, que en un recorrido de apenas 600 kilómetros (más o menos como si viajaramos desde Sevilla a Madrid), se puedan comtemplar tres de los más importantes volcanes que podemos encontrarnos a lo largo de toda la geografía mexicana.
Al poquito tiempo de haber salido de ese gran monstruo llamado Distrito Federal (o Tenochtitlan como se llamó en algún tiempo ya lejano) camino de Veracruz, se puede ver a ese gigante conocido como "La Mujer Dormida", o Iztlaccíhuatl.
No es que Iztlaccíhuatl (a ver... intentadlo leer bien, a mi me costó casi cuatro años...) signifique mujer dormida (ese es el nombre que los aztecas le pusieron), sino que su figura nos recuerda precisamente a eso... aunque la verdad es que en esta foto (tomada por mi con el teléfono, mientras viajaba por la autopista México-Veracruz) se nota nada o casi nada...
Este volcán que se encuentra, afortunadamente, en total inactividad es, junto con el Popocatépetl (o Popo pa los amigos), el que le da al Valle de la Ciudad de México ese perfil tan pintoresco que tiene...
...y que si no fuera por la contaminación que existe en esa pinche ciudad, se podría disfrutar de una vista maravillosa.
A pesar de todo, todavía existen dos o tres días al año (esos en los que parece que la contaminación no fue invitada a la fiesta) en los que podemos maravillarnos del hermoso espectáculo de ver a los dos volcanes juntitos...
Supongo que no estaré dando a conocer ningún record mundial, ni nada por el estilo, porque seguramente en otras partes más recónditas de este sufrido planeta, habrán cosas más extrañas.
Pero, insito, es curioso, por lo menos para esta mente tan pequeñita que escribe esta sarta de pamplinas, que en un recorrido de apenas 600 kilómetros (más o menos como si viajaramos desde Sevilla a Madrid), se puedan comtemplar tres de los más importantes volcanes que podemos encontrarnos a lo largo de toda la geografía mexicana.

No es que Iztlaccíhuatl (a ver... intentadlo leer bien, a mi me costó casi cuatro años...) signifique mujer dormida (ese es el nombre que los aztecas le pusieron), sino que su figura nos recuerda precisamente a eso... aunque la verdad es que en esta foto (tomada por mi con el teléfono, mientras viajaba por la autopista México-Veracruz) se nota nada o casi nada...
Este volcán que se encuentra, afortunadamente, en total inactividad es, junto con el Popocatépetl (o Popo pa los amigos), el que le da al Valle de la Ciudad de México ese perfil tan pintoresco que tiene...
...y que si no fuera por la contaminación que existe en esa pinche ciudad, se podría disfrutar de una vista maravillosa.
A pesar de todo, todavía existen dos o tres días al año (esos en los que parece que la contaminación no fue invitada a la fiesta) en los que podemos maravillarnos del hermoso espectáculo de ver a los dos volcanes juntitos...
Etiquetas: México
Comentarios:
Publicar un comentario
<< Página principal